MITO: La LCFF es una fuente de dinero adicional que los distritos reciben del estado.

VERDAD: El sistema de financiamiento escolar ha cambiado en su totalidad. La LCFF es la nueva normativa. La mayoría del dinero que un distrito recibe del estado está ahora distribuido en base a esta nueva fórmula la cual posee sus propias normativas con respecto a gastos y responsabilidad financiera. Esta ley entró en efecto el 1ro de Julio de 2013.

MITO: Mi distrito puede gastar el dinero de la LCFF a su antojo, ya que el control local es su “objetivo principal.”

VERDAD: No obstante que los distritos ahora tienen mayor flexibilidad para realizar sus gastos en comparación con el pasado, aun existen normativas que rigen esos gastos. Los distritos escolares están recibiendo más dinero por cada estudiante de bajos recursos, por los que aprenden inglés, o por los que reciben cuidado tutelar. Los fondos adicionales generados por estos estudiantes se distribuirán a través de dos tipos de subvenciones llamadas suplementaria y centralizada, y deben ser invertidos en servicios que apoyen a estudiantes que aprenden inglés, a los de bajos recursos, o a los que reciben cuidado tutelar. Además, los gastos de los distritos y escuelas deben seguir los lineamientos del plan de mejoramiento educacional de los distritos y escuelas, creado para generar incrementos en las cuotas de graduación y en la preparación pre-universitaria de sus estudiantes.

MITO: No existen restricciones para la utilización de los fondos de la LCFF hasta que la ley esté complemente implementada en los próximos ocho años.

VERDAD: Los distritos deben invertir inmediatamente todos los fondos recibidos a través de las subvenciones suplementaria y centralizada en estudiantes que aprenden inglés, estudiantes de bajos recursos, y estudiantes que reciben cuidado tutelar. A medida que crezcan los ingresos del estado durante los próximos ocho años, también habrá más dinero para ser utilizado por los distritos escolares. Y aunque la Junta Estatal de Educación establecerá y adoptara normativas más detalladas para el uso de estos fondos desde hoy y hasta Enero del 2014, los requisitos de canalizar el gasto de estos dineros adicionales en los estudiantes más necesitados siguen en pie y se establecieron el 1ro de Julio de 2013.

MITO: Bajo la LCFF hay menos transparencia de la que existía antes.

VERDAD: A la par de los cambios del sistema de financiamiento, el estado instituyó nuevos requisitos y responsabilidades. Los distritos deben crear planes que describen sus objetivos, acciones, y métodos de gastos en ocho aéreas prioritarias. Estas normas deben aplicar para cada grupo estudiantil y para cada escuela. Si los distritos no logran alcanzar ciertas metas, la oficina de educación del condado o el departamento estatal de educación están obligados a intervenir y proveer el apoyo necesario para el alcance de estos objetivos. Los detalles de este proceso están siendo desarrollados por la Junta Estatal de Educación.

MITO: Los Distritos no necesitan reportar la forma en que son utilizados los fondos provenientes de la LCFF.

VERDAD: Los Distritos deben detallar la forma en que usaran el dinero dentro de su plan local. La Ley es desafortunadamente poco específica en la cantidad de información que los distritos deben reportar a nivel escolar. Nosotros creemos que es importante que el estado clarifique que los gastos escolares a nivel local deben reportarse en el internet, de una manera clara y en un formato accesible para la comunidad en general.

MITO: Ya que la LCFF le está enviando dinero a los distritos escolares, ellos ahora pueden subir los salarios y recontratar a los bibliotecarios, consejeros, maestros de arte y de educación física, e incrementar el personal de los programas AP.

VERDAD: Aunque los distritos están recibiendo más dinero, todavía existen normativas de cómo gastarlo. En particular, los distritos deben utilizar los dólares adicionales en los estudiantes más necesitados e incrementar y mejorar los servicios para esos estudiantes. Las subvenciones suplementaria y centralizada no pueden ser intercambiadas por aumentos generales de salario o por programas generales, aunque esos sean proyectos muy honorables. Por otro lado, los ingresos de la subvención básica son dineros destinados para mantener la luz encendida y a las escuelas funcionando, y esos fondos si pueden ser usados con ese propósito.